Marisa Santana pidió la Banca del Ciudadano para pedir que se aclare la muerte de su hijo.

Marisa Santana madre de Exequias Franco, el joven de 16 años que fue encontrado sin vida en calle Circunvalación de nuestra ciudad. Solicitó a los concejales ayuda para aclarar la muerte de su hijo.

La madre el joven, reclama saber quien lo mató y qué le pasó a su hijo. Por eso solicitó ayuda en la sesión del Honorable Concejo Deliberante pidiendo un abogado y que pronto se ponga en funcionamiento una oficina de derechos humanos en el departamento, para tratar su caso y el de tanta gente que pasa por situaciones similares y no tiene a donde ir.

El edil del PD-PRO Ramiro Zaragoza se comprometió para acompañarla en el caso, «me pongo a tu disposición a partir de mañana para colaborar y ver como han sido los hechos».

En el año 2006 el Honorable Concejo Deliberante aprobó la ordenanza 3360 en donde se crea el «Área de Derechos Humanos» para que funcione dentro del ámbito municipal. El año pasado el concejal Víctor Luis Gutiérrez del Frente Renovador solicito nuevamente la creación de esta oficina en Alvear, pero hasta el momento no se designó a nadie para ese área.

Marisa Santana aseguró que a Exequiel lo habían amenazado de muerte, si bien reconoce que su hijo tenia un antecedente, los demás eran solo sospechas. La madre expresó que «Como te vestís te tratan. Yo no tengo antecedentes y por el solo hecho de ponerme una campera con tres rayas soy una negra. Nos tratan por portación de rostro. Necesitamos la oficina de derechos humanos acá en Alvear, para que podamos tener a quien recurrir. No cuento con plata para poner un abogado en particular. No hay policías detenidos por la golpiza de mi hijo, el no era un criminal, tengo muchos testigos y ninguna solución.La policía levantaba a mi hijo en la calle y no lo llevaba a la comisaría, terminaba tirado en la calle 16 golpeado».

«Nadie tiene derecho a tocar a un hijo, y menos a un menor. Ellos le sacaron todas las posibilidades a mi hijo, si quiso cambiar no lo dejaron» concluyó.